Informales Noches de Primavera

La excusa, era la venida del hijo prodigo a tierras astures... la finalidad, la de siempre pasar una estupenda tarde-noche con esa gente fantástica con la que ya son muchos los ratos buenos que podemos contar.
La tarde comenzaba en una terracita, disfrutando del fresquito que había en Oviedo, poco a poco nos fuimos juntando unos cuantos que venían o iban, según su disponibilidad.
El frió nos hizo cambiar de sitio y gracias a una de las asistentes descubrimos uno mas adecuado para nuestros "chanchullos", allí y como ultimamente es habitual una modificación de un juego (esta vez no tocaron cartas) dió mucho de si ¡¡y eso que solo fue una partida!! Fichas, dados y gusanos hicieron las delicias de los vencedores que eligieron "putadita" para los menos afortunados....
Una oportuna visita a nuestro Sex Shop de cabecera, y donde siempre nos tratan de una manera alucinante, hizo que los perdedores salieran con unas "pajitas tuneadas" con las que beberían el resto de la noche.

Por fin el homenajeado hizo aparición y después de otro rato largo de charla y alguna despedida por cuestiones laborales, la locura se apoderó de nosotros y acabamos camino de Avilés donde todas nuestras ilusiones estaban puestas en unas sardinas... que quedaron en eso, en ilusiones, ya que el sitio donde íbamos estaba cerrado. 
¿Pero... donde esta el problema? Mientras algunos hacían la elección del nuevo sitio algunas demostraban sus buenos haceres dialécticos incluso con la boca llena... Se elige un nuevo sitio y listo... ¿o no?
Pues no... porque hay que saber llegar y no todos sabían. Menos mal que un voluntarioso guia, que al final por tanto hacer de chofer fue el que menos disfrutó de la cena, consiguió juntarnos a todos y que pudiéramos empezar a disfrutar mas aun de la velada con algunas caras ya conocidas y otras a las que esperamos volver a ver.

Brindis por los ausentes, y por los presentes... la noche acababa de comenzar.

De nuevo dirección a Oviedo, donde Lucy nos esperaba con sus mejores galas, haciendo babear a mas de uno con sus impresionantes botas y proporcionándonos momentos de risas y mas cachondeo entre viajes a baños a los que algunos ni fueron por miedo a .... ¿perderse?.

La noche finalizó para algunos y continuó para otros... cada uno en un destino, pero todos con una gran sonrisa. Momentos, confesiones de secretos, coincidencias ... Las informales noches de primavera, dan para mucho.